¡¡¡ Al abordaje !!!
Maite vino buscando una tarta con la que sorprender a su hijo en su octavo cumpleaños.
Lo tenía clarísimo, debía ser un barco pirata.
Delicioso bizcocho de limón relleno de confitura de fresa forma el cuerpo del barco.
Excepto el mastil todo es comestible.
No podían faltar los detalles que hacen q sea un auténtico barco pirata,
el cañon, el cofre del tesoro, un pirata patapalo con parche en el ojo, y la bandera pirata en lo alto del mastil.
Muchas felicidades Arkaitz